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Los pilotos del equipo Repsol Honda visitan el Repsol Technology Lab, ubicado en Móstoles, donde se desarrollan los carburantes y lubricantes que usarán en el Mundial de MotoGP y también se trabaja en biocombustibles para la competición que se utilizarán próximamente.

Marc Márquez y Pol Espargaró han visitado hoy el Repsol Technology Lab de Madrid, donde han conocido de primera mano cómo se producen los compuestos con los que competirán durante las 21 carreras del Mundial de Motociclismo 2022. Durante la visita, ellos mismos han podido fabricar su propio combustible sostenible.

De la misma manera que los pilotos del equipo Repsol Honda se esfuerzan por rebajar cada milésima, todas las personas del Repsol Technology Lab trabajan intensamente para marcar la diferencia a la hora de formular sus carburantes y lubricantes. Cada año parten de un lienzo en blanco con la determinación de formular el mejor compuesto posible, para que tanto Márquez como Espargaró puedan luchar por el título de la categoría reina del motociclismo.

A esa ambición se ha añadido un nuevo reto de eficiencia y sostenibilidad para el Repsol Technology Lab, ya que en 2024 todos los carburantes de las motos del Mundial deberán contener, al menos, un 40% de combustible de origen no fósil y en 2027 un 100%.

Este futuro escenario que Repsol y HRC se preparan para afrontar es el que hoy han experimentado sus pilotos, creando su propio combustible sostenible y comprobando que el nivel de exigencia es tan alto como el que tienen a los mandos de sus motos de elevadísimas prestaciones.

Marc Márquez:

“Siempre es interesante conocer mejor cómo se produce el combustible que utilizamos, al final es la ‘comida’ de nuestra moto y cuanto mejor alimentada esté, mejor rendirá. Tenemos la suerte en el equipo Repsol Honda de poder contar con el trabajo de desarrollo de Repsol en nuestros combustibles y biocombustibles, que combina eficiencia y altas prestaciones, sin olvidar la sostenibilidad”.

Pol Espargaró:

“Creo que es importante conocer el proceso de producción de nuestros combustibles. Además, el futuro se encamina a la sostenibilidad y, como padre que soy, lo vivo más en primera persona. Estoy agradecido a Repsol porque siguen moviendo el mundo y lo hacen de una manera cada vez más sostenible. Todo ello pasa por la tecnología y por la competición, donde nosotros tenemos que rendir al máximo, con todas las prestaciones, pero también con límites de combustibles, lo que te obliga a ser más eficientes. Repsol es pionera en muchos sectores y seguirá jugando un papel muy importante también en el futuro, como podremos ver cuando Dorna dé el paso a los biocombustibles”.

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